Dos arquitectos, uno italiano y otro español, Libera y Cabrero, acuden a la ciudad de Roma, uno para quedarse y confrontarse con la ciudad y el peso de su Historia y otro para no olvidarla ante cada proyecto que surgiese a lo largo de su trayectoria. Frente a una misma realidad, respuestas semejantes cohabitan en dos contextos diferentes que dan como respuesta dos arquitecturas que sitúan la idea de monumentalidad en el edificio público como concepto intrínseco a través de dos discursos paralelos. Esta condición del edificio público monumental del primer racionalismo italiano, heredero de la Antigüedad Romana, fue el elemento extraído por Cabrero de la arquitectura de Libera, con sus propios matices. Interesante será descifrar cada uno de los diálogos ocultos que surgirán entre ambos arquitectos.